miércoles, 1 de septiembre de 2010

CLASIFICADOS A OCTAVOS DE FINAL EN TURQUIA 2010

AHORA EN BUSCA TERMINAR PRIMEROS EN EL GRUPO


El estadio ubicado en Kayseri, es testigo privilegiado en la primera fase del mundial de Turquía. Es que allí es donde un grupo de hombres con una musculosa azul, con un escudo celeste y blanco, y con un nombre en el pecho que dice ARGENTINA; va sorteando escollos fecha tras fecha, dejando su marca en la zona pintada y embocando bolas cruciales en un circulo llamado aro. Ese grupo de hombres, identificados como la Generación Dorada, es la selección nacional de Básquet dirigida por Sergio Hernández. Un equipo que sabe cuándo aparecer para mostrar su carácter, no es casual que saque lo mejor de su juego y su fortaleza mental en momentos que parecen adversos, por eso es que partido tras partido siguen demostrando porqué son dorados.
Un equipo con un corazón gigante, que soporta los imponderables. Por sí hacía falta un nuevo ejemplo, apareció en el medio del torneo cuando en la madrugada previa al segundo partido, Fabricio Oberto sufrió una descompostura intestinal y una fuerte fiebre, que lo tendrá afuera de competencia, al menos hasta el último partido de la primera fase ante Serbia.
Gracias a las tres victorias consecutivas, Argentina está primera en el Grupa A y se viene Jordania, hay que ganar para mantenerse el primer puesto hasta el partido ante Serbia, el otro con posibilidades de finalizar primero. Es importante terminar punteros en la zona, para los próximos cruces de segunda fase.
Si hay algo que sobresale en la Generación Dorada es la mentalidad ganadora.“Los demás resultados no me interesan. Sabemos que si ganamos todo somos campeones. Es la única cuenta que sacamos”, así lo describe el Luifa Scola, el gran capitán.


1ª FECHA: ARGENTINA 78 – ALEMANIA 74
Tuvimos que ponerle mucho huevo para sacar un triunfo, porque ellos volvían a emparejar tras cada ventaja nuestra. Nos costó mucho quebrarlos”, destacó Delfino, goleador con 27 puntos y además, con 8 rebotes fue el mejor del equipo en ese rubro. Figura del partido, el escolta con 38 minutos en juego, fue quien empujó y contagió durante todo el partido al quinteto en cancha. Siempre bien acompañado por sus compañeros que describen a la perfección lo que es jugar en equipo, lo que destaca siempre a la Generación Dorada. La presencia de Oberto, la organización de Prigioni, la insistencia de Scola anotando 20 puntos en un partido que le costó, los triples decisivos de Leo Gutiérrez y sus dedicatorias al Chapu Nocioni; y la suma de Junior Cequeira luchando toda bola como su fuese la última, con diez minutos excelentes en cancha ejemplificados en una zambullida al parquet, que culminó con un robo espectacular que hizo estallar en aplausos a todo el banco.
Alemania, con más alto porcentaje en rebotes y con excelentes tiradores de tres (10 de 21), fue muy difícil y costó la victoria. Pero como es habitual, el equipo elevó su rendimiento al final y tuvo el carácter que se necesita para cerrar un partido en el que se sufrió hasta el final.

2ª FECHA: ARGENTINA 74 – AUSTRALIA 72
Se ganó un partido en el que se estuvo por muchos momentos abajo del marcador y con un final dramático, tal es así que si el triple final de Adam Gibson hubiese entrado en el último segundo nos quedábamos con las manos vacías. La selección pudo lograr un triunfo muy costoso con una actuación destacada de Pablo Prigioni, quien tomó decisiones acertados en momentos cruciales. "La verdad es que la diferencia fue ese triple de ellos que no entró en el final, para ganar este tipo de juegos siempre se depende un poco de la fortuna. Hay que prepararse para sufrir… a nosotros no nos sobra nada y habrá que padecer todos los días", describió el base argentino.
El capitán Scola, con 31 puntos y nueve rebotes, fue la estrella del partido, pero el infaltable aporte de Leo Gutiérrez con sus tiros fue vital para la remontada: hizo cinco de los nueve triples argentinos y sumó 17 puntos. El equipo otra vez reaccionó cuando más lo necesitaba y fue en el último cuarto donde tuvo su mejor versión para poder ganar un cotejo que venía complicado.

3ª FECHA: ARGENTINA 91 – ANGOLA 70
Tercera victoria consecutiva y está vez en un partido más sencillo. Aunque la amplia ventaja se aseguró recién en el último cuarto. Luis Scola jugó un partido perfecto, con 32 puntos y 8 rebotes, fue líder en estadísticas. Tan líder dentro y fuera de la cancha, el capitán declaró post partido: “Lo primero que tenemos que aceptar es nuestra realidad. Vamos a tener que pelear todos los partidos. Hoy en día no somos una aplanadora que saca 40 puntos de diferencia en el primer tiempo”. Con sus 32 puntos, el Luifa quedó a tres de la mejor marca personal de un argentino en los mundiales, que es la de Alberto De Simone con 35 puntos en Brasil 1963.

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