El Batmán de Rio de Janeiro
Las manifestaciones, estigmatizadas bajo la frase “Nao vai ter copa”, tienen un personaje llamativo como máxima expresión: el Batman de Río de Janeiro. Es Eron Melo, un técnico dentista que se convirtió en el líder de la protestas, quien en una charla con MundialDeFondo desarrolla los motivos por los que salen a la calle a expresar su descontento...
Esta ola de huelgas, que vienen sucediendo en
Brasil desde la Copa Confederaciones del año pasado (junio de 2013) en contra
del gasto del Gobierno para el Mundial, son la forma de expresarse por parte de movimientos sociales organizados, desde sindicatos a partidos de
izquierda radicales, ONGs críticas, el Movimiento de Campesinos Sin Tierra o
los Sin Techo, líderes indígenas de diferentes etnias, profesores y hasta conductores
de autobús, quienes aprovecha su vez la cercanía de la Copa para pedir aumentos salariales.
La serie de protestas, divulgan su descontento por
diversos focos como las 170 mil personas tuvieron que abandonar sus hogares
debido a construcciones para el evento, los 5 mil millones de dólares que se
llevará la FIFA exentos del pago de impuestos por una ley promulgada en el año
2010, las zonas exclusivas del máximo ente del fútbol, con dos kilómetros de radio
a los alrededores de los estadios, donde controlará el movimiento de gente y la
exclusividad a sus sponsors para que no sean molestados por ningún tipo de
competencia. Otro punto de ebullición social es el de las favelas, ya que
existen más de 6 mil barrios marginales en Brasil habitados por casi 11
millones y medio de brasileños tal como reflejó el último censo del país, lo que
refleja un 6 % de la población.
Se especula que el Gobierno terminará gastando cerca de 12 mil millones de dólares para la organización del mundial, lo que equivale a unos 30 mil millones de reales -moneda local-, que muchos brasileños sienten que ese dinero se debería haber utilizado en las necesidades que aquejan a la sociedad como la educación, la seguridad, la salud y la vivienda principalmente. Y no en el lujo de organizar un mundial de fútbol. El alto costo del torneo es el gran fastidio entre muchos brasileños.
Brasil 2014 será el mundial más caro hasta el momento, cuadriplicando el dinero invertido por Sudáfrica en 2010, que fueron 3 mil millones aproximados y por entonces era el más caro de la historia. Al analizar que los miles de millones puestos para la Copa provienen de fondos públicos de Brasil, mientras los ingresos de entradas y de derechos televisivos se los queda la FIFA libre de impuestos –ocurre en todos los mundiales-, es lógico y hasta razonable la bronca de cualquier sociedad que sufra carencias en temas relevantes en la vida diaria.
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| La manifestación iniciada en "Cinelandia", en la plaza del teatro municipal. |
Melo, bajo la máscara de Batmán, apunta al Gobierno y a uno de los máximos ídolos futbolísticos de su país como Ronaldo -campeón dos veces y máximo goleador en mundiales, por ser miembro del comité organizador local. "Ronaldo traidor", muestra en un cartel.
Sin embargo, hasta el propio Ronaldo declaró -publicado el viernes en el periódico Folha de Sao Paulo- sus críticas más duras hasta ahora sobre la planificación del Mundial, que comenzará en dos semanas: "He seguido todo muy atentamente. Esperaba que todo saliera bien, aun hasta el último minuto. Es una vergüenza. Me siento consternado. Hay un desprecio hacia la población. Creo, principalmente, que no hubo una planificación seria. Y tuvimos tiempo: siete años". Y agregó: "Entré en el comité porque la Copa era una gran oportunidad para Brasil. Pero no la estamos aprovechando".
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