CON SABOR AMARGO
El seleccionado argentino de handball finalizó el mundial de Francia 2017 con una derrota ante Polonia, así finalizó en el 18º puesto muy lejos del nivel esperado y sin premio consuelo.
El partido contra los polacos arrancó muy parejo, ambos equipos con buen ataque aprovechando espacios en la defensa rival y se fueron al descanso empatados 13-13. El complemento comenzó con otra actuación destacada de Schulz bajo los tres palos y con gran efectividad en ataque, lo que puso a los Gladiadores 16-14 en los primeros diez minutos del segundo tiempo.
Sólido en defensa y agresivo ataque, los dirigidos por Eduardo Gallardo se pusieron en ventaja 22-17, y cuando parecía que el partido se encaminaba para el equipo argentino, los europeos aprovecharon errores y lograron un parcial de 7-0 para llevarse la victoria. El ingreso del arquero Mateusz Kornecki fue clave, ya que atajó los siete disparos albicelestes que recibió y Polonia venció 24 a 22 tras doce minutos sin goles argentinos.
Federico Fernández fue el máximo goleador del partido con 8 gritos, mientras Pablo Simonet y Federico Vieyra marcaron 4 tantos cada uno.
Argentina finalizó Francia 2017 decimoctavo, igual posición que en Túnez 2005, Croacia 2009 y España 2013. Muy lejos del objetivo de clasificar entre los 16 mejores y del 12º puesto obtenido en Suecia 2011 y Qatar 2015, las dos mejores actuaciones en mundiales.
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